23 de nov. 2009

Micromachismos



25 de novembre. Dia contra la violència a les dones

En “Micromachismos. El poder masculino en la pareja moderna”, Luis Bonino nos habla de los micromachismos, llamados también sexismo benevolente, terrorismo íntimo, violencia de baja intensidad, etc. Él los define como “pequeños y cotidianos ejercicios de poder” que permiten a los varones hacer lo que quieren pero impiden que las mujeres hagan lo mismo. Se trata de “hábiles artes, comportamientos sutiles o insidiosos, reiterativos y casi invisibles” que los varones utilizan “no tanto para sojuzgar sino para oponerse al cambio femenino”.

Bonino distingue cuatro tipos de micromachismos: utilitarios, encubiertos, de crisis y coercitivos.

Los Mm utilitarios se realizan especialmente en el ámbito de las responsabilidades domésticas y suponen el aprovechamiento de la disposición femenina para el cuidado y la no responsabilización de los varones en lo doméstico. Se naturaliza su rol de cuidadora (de la pareja, de los hijos…) y de mantenedora del vínculo y de la comunicación; se le hacen requerimientos más o menos solapados (¿Dónde está mi camisa? significa Búscala y dámela); se niega la reciprocidad del cuidado porque yo no sé, etc.

Los Mm coercitivos “sirven para retener poder utilizando la fuerza psicológica o moral masculina". Suponen por ejemplo el uso abusivo del espacio físico (el sillón, la mejor posición para ver la tele…) y del tiempo para uno mismo (descanso, ocio a costa del trabajo de ella…). También significa apelar a la superioridad de la lógica varonil cuando las mujeres realizan demandas (¡Un poco de seriedad, lo que dices son estupideces!)

Los Mm encubiertos “intentan ocultar su objetivo de imponer las propias razones abusando de la confianza y credibilidad femenina”. Dificultan e impiden la intimidad a través del silencio, del aislamiento, del mal humor manipulativo y del ninguneo. Éste último supone, por un lado, no reconocer lo valioso de las mujeres: sus necesidades, valores, aportes al bienestar masculino y familiar y, por el otro, sobrevalorar lo poco que hace el varón, convirtiendo lo escaso en mucho más valioso que lo habitual. También es Mm encubierto la seudonegociación (hablar pero sin ceder ni acordar nada porque él no se moverá de su posición), la inocentización culpabilizadora (¡Exageras, estás loca!) y la autojustificación (echar balones fuera; hacerse el tonto, el bueno o el inexperto, minusvalorar los propios errores…)

Los Mm de crisis ocurren en momentos en que aumenta la autonomía femenina o se produce una pérdida laboral del varón o una limitación física. Se trata de situaciones en las que la mujer pide más igualdad y el varón recurre a una especie de resistencia pasiva (¡Ya te apañarás con la casa si decides trabajar fuera!); se da tiempo (posterga el cambio hasta el hartazgo de ella o un ultimátum de separación); aguanta el envite (hasta que se canse) o critica el estilo (Si me lo dijeras de otra manera).

Los efectos de los Mm sobre las mujeres son:
- Sobreesfuerzo psicológico. Disminución de sus reservas emocionales y de energía para ellas y para el desarrollo de sus intereses vitales.
- Inhibición del poder personal. El desarrollo personal se hace lento. Aumentan las actitudes defensivas y la queja inútil. Se recurre a la mano izquierda para recuperar poder.
- Inhibición de la lucidez mental (tontificación). Dificultad o imposibilidad para realizar acciones valientes, realizar críticas eficaces…
- Deterioro de la autoestima y de la autocredibilidad. Inseguridad, incompetencia, impotencia...
- Malestar difuso, irritabilidad crónica…

Los efectos en la pareja son:
- Relación asimétrica, no igualitaria. Autonomía de los varones a costa de las mujeres,. Supremacía de los intereses de los varones…
- Culpabilización a la mujer por el deterioro del vínculo. Ella se queja inútilmente, él se inmuniza no escuchando. El mandato de género hace que la mujer se autoinculpe y que no se reconozca el machismo.
- La convivencia se convierte en una guerra fría, en un lugar donde la mujer no se puede relajar.

La violencia es una pirámide. En la punta están los asesinatos. Debajo el maltrato, pero en la base están los micromachismos: el control (mirar el móvil, controlar la ropa, los amigos, ¿dónde estabas?, ¿por qué no has llamado?, no me gustan tus amigas…), negarse a ponerse el condón, el chantaje emocional para conseguir sexo, los insultos, la delegación de responsabilidades porque tú lo haces mejor… Tod@s podemos ser el sustento de la pirámide.


10 comentaris:

bloguero ha dit...

María!, ho sent però no he pogut lleguir el post, demà ho llig i te'l comente. Jaja jo el vaig lleguir i vaig copiar-ho, eixe text el tenia que publicar, crec que és molt representatiu de la barretja de sentiments, espere que et servisca.

Jh ha dit...

Hola María.

Al llegir aquesta entrada he pensat que de vegades en la meua casa es produïen Mms fa uns anys y m'he sentit un poc mal al llegir-lo perque de vegades jo faig aço i no em done compte

Rosa Sanchis ha dit...

KKK
Hola JH, aquest article no parla de series, ni té fotos atraients... Parla del MASCLISME, i tu has triat llegir-te'l i has descobert coses.

Sentir-se malament, de vegades, és inevitable. Però és una tristesa constructiva que vol dir que te n'has adonat d'alguna situació i que ja estàs en marxa per a canviar-la.

I són molt necessàries les persones que estan EN MARXA.

alumna de 15 años ha dit...

la mayoria de los hombres piensan que las mujeres solo estamos para fregar y cocinar, pero creen que no somos capaces de superarnos a nosotras mismas,nosotras las mujeres queremos igualdad, pero la mayoria de hombres solo piensan en humillarnos, en hacernos sentir mal, en hacernos creer que no valemos para nada, pero en verdad no es asi,todas las mujeres valemos mucho y no deberiamos dejarnos ofender por ningun patan y saber que son ellos los que caen mas bajo, que son unos patanes cobardes, que saben que sin nosotras no pueden vivir.Nos dicen que nos quieren pero en verdad lo dicen solo para retenernos, pienso que las mujeres debemos hacernos respetar.

A.M.P ha dit...

Los micromachismos es lo primero que habria que erradicar por asi decirlo pero eso ya no depende de la ley si no de las mujeres que lo sufren, simplemente para que estas cosas no lleguen a mas. Las mujeres que empiezan a sufrir estos micromachismos tendria que cortar con la relacion o hablas con su pareja para que no pueda llegar a mas.

Esther ha dit...

Aquesta entrada és meravellosa, si molts homes la llegiren compendrien més les dones. Es una realitat que moltes dones vivim i que "ells" n'hi se'n adonen.
Per reafirmar-se com a dona fan falta reflexions tant clares com aquesta. Gràcies.

Rosa Sanchis ha dit...

Hola Esther, la veritat és que sí, que la descripció dels micromasclismes que fa Luis Bonino és molt encertada. El masclisme és subtil, per això costa tant que desaparega!
Et recomane molt i molt llegir els articles de Bonino.
Una abraçada.

Esther ha dit...

Gràcies, he entrat a la seva web i ja estic llegint !!

Rosa Sanchis ha dit...

Són també molt bons els articles de:
http://vocesdehombres.wordpress.com/
És esperançador veure que hi ha homes preocupats per la igualtat!
R.

redamalva i ali kent ha dit...

Hola som Ali kent i Reda malva i anem a parlar de l'entrada dels microomachismes.
Molts homes pensen que les dones només es troben per a fer els treballs de la casa, però s'equivoquen, ja que les dones poden fer els mateixos treballs que els homes i, molt millor que els homes. Pense que moltes dones l'únic que volen es tindre igualtat de génere i també tindre els mateixos drets i oportunitats, però molta homes no pensen així hi creuen que les dones són uns simples joguets amb les quals poden fer el que vulguen i utilitzar-les com a objectes sexuals.
Pensem que els homes no podríem fer sense les dones i q deuríem respectar-les i cuidar-les el màxim possible. Molts homes pensen que no necessiten cap ajuda de les dones i que son autosuficients i poden fer tot sense niguna ajuda de cap dona, però no es veritat ja que els homes i les dones som èssers humans encara que tingam diferències físiques.
En conclusió les dones són les nostres companyes del día a día i tenen els mateixos drets i deures que els homes i no podem tractar-les mal i tenim que respectar-les.
Un salut.